Crónicas de una depresión
"Aparentaba que todo estaba bien, pero debajo de esa máscara de vanidad y falsedad, ocultaba mi verdadero rostro. Siempre llevé una máscara delante de la gente, pero mis verdaderos sentimientos de soledad y de tristeza embargaban mi alma. ¡Mentirosa! ¡Hipócrita! ---decía para mis adentros todas las benditas noches..
¡Él vino con ese error de fábrica para mi desgracia!
Han pasado muchos años desde que tuve esos episodios, de un pasado que seguía atormentándome, pues me culpaba a mí misma de las malas decisiones que había tomado en mi vida. En ocasiones, divagaba en las reuniones laborales, porque no tenía mente para dirigir ni analizar ni decidir nada. Aún recuerdo que somnolienta, iba al cuarto de conferencia de la empresa, donde mis subalternos me acostaban en un sillón, para que durmiera, tratando de ayudarme hasta que se me pasara el efecto de las …¡Sí, qué vergüenza! No comprendo cómo aún me respetaban, luego de semejante testimonio de vida.
Recuerdo, que a muchos empleados le firmé solicitud de aumento salarial, pero al día siguiente no recordaba nada de lo que había hecho. ¡Estaba completamente pérdida y dañada! Hasta que por fin, “Alguien” me encontró y me rescató, e hizo lo que nadie es aún capaz de hacer por mí: dar su vida por amor …No sé si en este blog se me permita decir su nombre: JESÚS